INGREDIENTES

Masa

Harina, 230 gramos
Manteca fría, en trocitos, 100 gramos
Sal, un poquitito
Agua helada, c/n

Relleno

Manzanas, 1/2 kg
Azúcar, 120 gramos
Ralladura de 1/2 limón
Canela en polvo, un poquito
Manteca derretida, 60 gramos

Varios

Crema de leche batida espesa, apenas azucarada, 150 gramos

Tamice la harina sobre la mesa, junto con la sal y agregúele los trocitos de manteca.

Frote la manteca y la harina rápidamente entre la palma de las manos, tratando de no pegotearla sino de dispersarla en partículas finísimas, como arena gruesa. De esto depende el éxito de la textura.

Ponga el granulado en un bol y agregúele de una por vez, las cucharadas de agua helada (5 ó 6 en total).
Mientras lo hace, aplaste los ingredientes con una cuchara hasta unir todo en una masa compacta. No agregue otra cucharada de agua sin haber absorbido bien la otra. Mucha humedad puede hacer fracasar la textu-ra de la masa

Pele las manzanas y córtelas en tajaditas transparentes
En un bol aparte, vaya mezclando el azúcar con la ralladura de medio limón y la canela.

Separe los 2/3 de la masa, estírela fina y forre con ella un molde desarmable de 22 centímetros, enmantecado y enharinado.

Rellene la tarta con capas de tajaditas de manzana, espolvoreadas cada vez con la mezcla de azúcar, ralladura y canela, y rociadas con la manteca derretida.

Cubra el relleno con el resto de masa estirada finita y repulgue los bordes en forma prolija.

Haga en la superficie 3 tajitos decorativos (para que escape el vapor) y cocine en horno caliente unos 45 minutos o hasta que la masa esté dorada y crujiente.

Retire, desmolde, y sírvalo tibio, ofreciendo aparte crema de leche batida y apenas azucarada.

Nota: este pastel puede rellenarse también con tajaditas transparentes de manzana o con compota seca y azucarada de la misma fruta.