4 claras de huevos grandes
3/4 tazas de azúcar refinada
1 cucharadita de vinagre blanco
1 cucharadita de esencia de vainillaa
Relleno:
4 yemas de huevo
1 cucharada de azúcar
2 cucharadaas de almidón de maìz
1 lata de 425 de damascos en mitades en puré
2 cucharadas de jugo de limón
2 cucharaditas de ralladura muy fina de naranja
Precaliente el horno a 180ªC.
Pinte una placa de 32 x 28 cm con manteca fundida o aceite; forrela con papel manteca y dibuje en este un círculo de 20
cm.
Con la batidora, bata las claras a punto de nieve suave en un cuenco pequeño y seco; agregue poco a poco el azúcar batiendo
constantemente después de cada adición hasta que la mezcla esté espesa y brillante y el azúcar se haya disuelto.
Añada el vinagre y la esencia y bata hasta mezclarlo todo.
Extienda la mezcla en el círculo y deje un poco hundido el centro.
Baje el horno a 150ªC y hornee el merengue durante 1 1/2 horas o hasta que quede pálido y crujiente.
Déjelo enfriar dentro del horno apagado con la puerta entreabierta.
Para el relleno: bata las yemas con el azúcar y el almidón de maíz en un cuenco mediano resistente al calor hasta conseguir
una crema espesa y pálida.
Caliente en un cazo el puré de damascos con el jugo y la ralladura de naranja hasta que esté a punto de hervir; retírelo
del fuego.
Vierta esta mezcla sobre la de huevo removiendo constantemente; ponga la preparación de nuevo en el cazo y remueva a fuego
medio durante 5 minutos o hasta que hierva y se espese; retire el cazo del fuego.
Cubra directamente la superficie de la mezcla con plástico transparente y deje que se enfríe.
Póngala entonces a cucharadas en la parte hundida del merengue y alise la superficie.
Déjela reposar 10 minutos antes de servirla cortada con nata montada y tiras de cáscaras de limón.
|